Stephanie Adams y su hijo Vincent cayeron 23 pisos y fueron hallados en un balcón del segundo piso de un hotel en Nueva York.
Una ex modelo de Playboy que mantenía un litigio legal por la custodia de su hijo se lanzó desde el vigesimoquinto piso de un hotel en Nueva York, suicidándose y matando al pequeño de 7 años, informaron las autoridades locales el viernes.
Stephanie Adams y su hijo Vincent cayeron 23 pisos y fueron hallados en un balcón del segundo piso a eso de las 8:15 de la noche en el patio trasero del Hotel Gotham, en Manhattan, dijeron las autoridades.
Madre e hijo se registraron en el penthouse del hotel a eso de las 6 de la tarde del jueves, horas después de que ella le dijo al New York Post que su esposo había contratado un abogado y ambos estaban tratando de evitar que ella se llevara a su hijo de vacaciones.
“Todo lo que quiero es llevarme a mi hijo y escapar de esta pesadilla por unos días”, dijo Adams al Post. “Pero ellos no me dejan”.
Funcionarios policiales dijeron que Adams, de 46 años, quien posó por primera vez para Playboy en 1992, estaba en una disputa legal por la custodia de Vincent con su esposo, Charles Nicolai, quien es quiropráctico en Manhattan. Estaban separados.
En los últimos meses la policía acudió varias veces a su casa en respuesta a llamadas, señalaron los funcionarios, los cuales no están autorizados para declarar, por lo que hablaron con The Associated Press bajo condición de anonimato.
La pareja estaba enfrascada “en una batalla muy amarga por la custodia del niño”, dijo Raoul Felder, abogado especializado en divorcios que representó a la mujer por un tiempo. Las diferencias eran tan fuertes que se entregaban al niño en una estación policial, algo inusual pero que ya ha ocurrido antes, dijo Felder.
El abogado añadió que era amigo de Adams desde hace 20 años, pero que hace dos meses dejó de representarla en el caso de divorcio. Hace poco ella deseaba ir a Europa para encontrarse con un novio que tenía allá y eso se convirtió en un problema en el caso, dijo Felder.
Aun así, “ella nunca sufrió de depresión mientras la conocí. Tenía algunos problemas, pero no depresión”, agregó.